Desde sus primeros experimentos personalizando zapatos en la florería de su madre hasta sus actuales colecciones conceptuales como "La Ciudad del Alma", Mariel Méndez comparte su visión sobre la moda, arte y su compromiso con la sostenibilidad a través de piezas de segunda mano.

• ¿Cómo describirías tu relación personal con la moda antes de comenzar a trabajar como artista en este campo? ¿En qué momento comenzaste a interesarte por la moda y el arte?

La verdad es que me encantaba, no en sí, en realidad, la moda como una tendencia porque nunca fui muy seguidora de estas. Más que nada me encantaba la versatilidad de la moda como en telas, en colores, combinaciones, todo esto que puedes adaptar en tu día a día, eso es lo que a mí me apasionaba. También me encantaban los cortes, los trajes sastres y vestidos como que tuvieran diferentes juegos, entre telas y figuras.

Mi mamá ha sido siempre muy femenina y ella es la que nos como implementó este rollo de “¿qué te vas a poner? No, pues ponte unos aretitos, peinate”. O sea, este como el impulso a verte mejor y sentirte mejor. Ella tenía una florería y nosotras llevábamos de repente zapatos y le agregábamos cosas como unas florecitas o unos listones.

Entonces, todo esto como añadir cosas extras a tus ondas existentes, fue lo que para mí generó como algo increíble y teniendo infinitas posibilidades. Básicamente en mi adolescencia me llamaba la atención las combinaciones de prendas. Y luego lo ejercí como MARALOVE, ya como artista, porque tenía que hacer una una sesión de fotos en la cual necesitaba vestimenta. Y como yo siempre he sido amante de las tiendas de segunda mano, entonces fui y dije, "Tengo que encontrar algo como que raro, divertido." Iba encontrando diferentes cositas y fue cuando las adapté a MARALOVE, que ya ahí se introdujo como la sesión de fotos con todo el respecto del tema de moda en conjunto con mi obra de arte.

• En tu biografía mencionas que invitas a "explorar la moda como un diálogo entre intuición y emoción". ¿Podrías profundizar en este concepto?

La intuición, es como esta parte que genera en ti un gusto, no solamente por seguir a lo mejor una tendencia o un color en tendencia, sino algo que a ti te llama. Algo que a ti te gusta y esto es la intuición, el saber poder abrir un poquito más tu mente y darle chance.

Como escucharte y decirte: "a ver, qué me gusta, qué me hace sentir cómoda, qué me hace sentir bonita”. Genera una emoción, un sentimiento que viene desde tu intuición, desde dentro de ti. No es un "Me gusta porque está de moda. Me gusta porque se ve muy padre. Me gusta porque se le ve bien a mi amiga", sino es algo más íntimo.

• Tus trabajos combinan el arte y la moda, ¿Qué te parece el trabajo transdisciplinario entre ambos campos?

Yo creo que no podría decir que es lo mismo, porque nunca va a ser lo mismo el arte y la moda. Pero están de la mano porque están totalmente ligados. La moda para mí es artística totalmente. Es arte porque lo puedes mostrar simplemente en colores, en cortes, en texturas, al igual que el arte. Solo que la manera de producción es distinta.

El desarrollo es distinto, pero el resultado final es lo mismo, es una obra de arte. O sea que cuando un diseñador crea una colección o un atuendo, es lo mismo que cuando un pintor crea una obra porque tiene todo un proceso a seguir, tiene una inspiración. Son los mismos pasos a seguir que una obra el crear moda. 

Y para mi la moda con el arte es nada más una fluidez natural que va y viene. O sea, bueno, obviamente a mí me encanta el arte y la moda y por eso a mí se me da. Igual hay artistas que dicen, "No, pues ni al caso, nada, no viene al caso, nada que ver en conjunto el arte con la moda". Pero para mí, como a mí me gustan las dos, yo sí lo hago como que sea fluido porque siento que es muy similar y viene desde el desde un mismo rinconcito. Es desde un gusto personal mío, también, algo que realmente es físicamente artístico.

• ¿Cómo es el proceso de selección de piezas de ropa que usarás? ¿Cuál es tu favorita para intervenir artísticamente? ¿Hay alguna pieza que hayas creado que tenga un significado particularmente especial para ti?

Es un proceso de inspiración, o sea, en el sentido de que no es como algo que planeo al 100% respecto al tema que voy a hacer.

Como todas mis colecciones tienen un título, un tema, una historia que cuentan eh un momento, una experiencia, una vivencia que tuve personalmente. Entonces de ahí surge primero, ahora sí que como dicen que a los artistas es bueno que les pasen cosas malas porque se inspiran y crean obras increíbles. 

Me pasa, por ejemplo, tengo un suceso en mi vida, una experiencia que marcó mi vida, positiva o negativa. Entonces, naturalmente tu cuerpo tiene que recuperar si le tienes que dar este este tiempo y ya que viene un poquito más como este espacio de inspiración en mí. Empiezo a capturar imágenes o pensamientos, incluso colores o algo que pase en la calle y me guste, a lo que le tomo una foto.

Entonces ya una vez que las tengo, ya es cuando digo, "Okay, voy a hacer esto, aquí a esto”. Es como un rompecabezas en el que ya junté todas las piezas, ahora lo tengo que armar y estructurar. Y ya después viene la parte divertida, que es juntar la ropa.

Entonces ya una vez que tengo todo el contenido, ya tengo las obras, lo último es la sesión de fotos y eso sí es lo que cuenta la historia. Por ejemplo, en la última sesión tenía muchas ganas de hacer algo expresivo y artístico en el momento, por lo que, así surgió la sesión de fotos que empecé a pintar en vivo. Con unos recortes también los fui pegando, entonces fue como muy experimental y así fue lo que me sentía.

• Nos has comentado que tu ser influye mucho en en tu arte, ¿tú crees que tu estilo personal, las cosas que usas día a día influye también en tus obras?

Yo creo que sí porque siento que definitivamente cuando no estoy vestida (arreglada) a veces trato de estarlo. Porque claro que uno quiere de repente flojear y ponerte tus cosas cómodas. Sin embargo, también siento que eso no te inspira, no te hace crear y crecer.

No quiero desmeritar el lado deportivo, sí puedes estar siempre de una manera deportiva bonita con la que puedes salir a todos lados. Pero yo hablo de este lado en el te arreglas, le pones un mérito a tu vestimenta. Hay maneras en las que puedes hacerte sentir mejor y eso también va a hacer que tú pues te envuelvas en este mundo de creativos, o sea, en ti misma. 

Porque para mí, sin duda, cuando yo no estoy arreglada, no me siento tan inspirada. Y siento que cuando lo hago tomo una personalidad distinta, me siento más empoderada, más en control y sin duda esto influye en mis en mis creaciones. Parte del proceso creativo.

• Como artista México-estadounidense, ¿De qué manera influye la herencia cultural, lo latino y lo estadounidense en tu expresión artística?

Para mí ha sido como muy natural crecer en la frontera entre Tijuana y San Diego, que es pues México y Estados Unidos. Como que los dos son uno para mí, o sea, es en donde crecí, es mi ambiente.

Pero creo que obviamente la cultura mexicana tiene para mi gusto personal muchísimo más que dar, más que ofrecer al mundo como cultural, familiarmente, de valores que la cultura americana. Para mí es un poquito más ordenada, estructurada, con las reglas, la tecnología, la modernidad…

Entonces, este lado mexicano que tengo es como mi corazón dulce, panecito y el lado americano es “¿dónde está la estrategia de negocio?”. O sea, es una dinámica más estructurada y la mexicana es más amorosa, cultural, de valores, pero también un poco más desordenada, ¿no?

México tiene una barbaridad de preciosidad de cultura en tejidos, bordados, en lentejuela, en diseñadores que ya se han visto. Siempre México es muy folclórico, mucha flor, muy abundante en color. Y eso a mí me súper encanta. Los americanos son un poco más serios, más secos. Los dos mundos se encuentran y se hacen uno, y esa es la fusión que tenemos viviendo en la frontera.

• ¿Cuáles son los desafíos que has encontrado al promover estas prácticas sostenibles en la industria de la moda? ¿Cómo ves el estado actual y el futuro de la sostenibilidad en el arte, la moda y en tu propio trabajo?

La sostenibilidad para mí es crucial. Aparte que es interesante porque conoces a las generaciones pasadas por medio de la ida a una tienda (de segunda mano). Es lo que le digo a veces a mi hermana, a Iliana, la musa que se sale en mi Instagram, que me encanta ir a una tienda de segunda porque ves las historias de toda la gente y quién sabe cómo cada una cuidaba sus cosas. Te pones a pensar y observar mil cosas, es muy padre. Y también obtener piezas que sabes que, ahorita, en este momento no se van a crear, que el material o la calidad ya no va a ser la misma.

Hay un exceso incontrolable de ropa nueva y la verdad es que, sin duda, yo soy súper pro sustentabilidad. Compra usado. Entre amigas se pueden prestar, regalar o intercambiar ropa. “Hoy a ti te queda a mí ya no, ya no me lo pongo, póntelo tú”. Creo que la ropa tiene mucho tiempo para poder seguir dándole vida. Ahora ya se está haciendo mucho más tendencia porque antes sí sin duda era como “Ay, este no, yo no te compro porque a mí no me gusta usar cosas usadas”.

Para mí ha sido yo creo que lo único que he tenido reto, clientes me han dicho eso. Y por supuesto que lo respeto. Hay gente que siente que puede ser de mala calidad o está el desinterés. Pero eso eso solamente te habla sobre una educación personal no está en un nivel en el que le importa la sostenibilidad.

Yo creo que para un futuro deberían de haber más y más tiendas de segunda mano y yo, por ejemplo, lo que hago es que soy curadora de estas piezas. Si veo y me encuentro algo que me gusta, pues obviamente lo subo a mi tienda de línea y pues es eso es lo que te va a distinguir, de tu tienda y de tus gustos.  Esas son las tiendas que vienen en un futuro, o sea, cada una para definir tu estilo.

• ¿Por qué el nombre MARALOVE?

MARALOVE surgió en un accidente hace 10 años. Yo nunca tuve planeado tener una marca artística. Solamente hacía dibujos y este bosquejos de chavas, de mujeres, de caras. No fue algo que planeé.

De repente una amiga que tengo estaba haciendo una venta de garaje, y me dice, "Oye, te quisieras poner un puesto en el que pudieras vender tus pinturitas, tus tarjetas o todo lo que tuviera que ver con arte”. Y yo, híjole, pero no tengo nada, no tengo nombre, no tengo logo. Me dice, "No, pues invéntate uno."

A mí “Mara” siempre me había fascinado. Siempre dije, "Cuando tenga una hija le voy a poner Mara o cuando tenga una perrita que se llame Mara”. Me encanta y es como un hombre también muy representante de Mariel, pero fuerte. Entonces dije, "Sí, le voy a poner Mara, ¿no?".

Cuando mi amiga me dice, "Ponle un nombre, ponle un nombre a tu marca”, me fui a mi Instagram y paré en donde decía esa pinturita que había hecho que decía Mara y abajo Love. Y dije, "Ay, pues igual le pongo MARA LOVE". Y ya después lo cambié porque dije, "Pues es que como todas me dicen, "Ay, MARALOVE, MARALOVE", o sea, lo hicieron una palabra y me dice mi intuición, “¿sabes qué? cámbialo a MARALOVE”. Me encanta porque es un reflejo de lo que amo, del arte y la moda, y Mara que es mi lado extrovertido.

•  Hace poco sacaste tu última colección, The City of Soul, que sugiere una conexión entre lo urbano y lo espiritual. ¿Nos podrías contar más sobre esto?

Mi última colección, La Ciudad del Alma, es básicamente una introspección a mí misma, de cuando, a veces, cuando tú tienes este afán por vivir pero estás nada más complaciendo,  haciendo y dando a la gente o a tu entorno en tu trabajo, pero nunca te haces un clavado en ti. O sea, ¿Qué te gusta?

Vas haciendo esta pregunta en ti, vas creciendo y vas tomando decisiones importantes que te hacen sentir. “Si estoy triste, no tengo que sonreír, igual y mejor me retiro” o no me expongo ante una situación en la que sé que no es la mejor. 

Entonces esto es La Ciudad del Alma, una serie de fotografías y arte. Las fotografías destacan momentos en los que tienes todo, todo está lindo alrededor de ti, te ves linda, tienes tu vestimenta linda, pero tú no tienes esta motivación, no te importa. Pero vas creando un poquito de espacio en ti, preguntándote hasta que llegas a un punto en el que dices, "Wow, o sea, ya me siento yo". 

Y la última foto, es donde está un vestido blanco tejido, que abajo tiene un vestido, que es como todo lo que conforma tu alma, es todo lo que está a tu alrededor.

• ¿Qué es lo que se viene a futuro para MARALOVE, para Mariel Méndez? ¿Tienes pensado algún viaje a Chile? 

Ay, sería fascinante (el viaje a Chile). Para proyectos futuros tengo muy en mente hacer un café galería. Ese es mi sueño en este momento. Quiero que haya libros, que haya arte, que esté un salón para que pueda exponer, no sólo yo, sino otros artistas también. O sea, un espacio de arte que no solo esté en venta, sino en continua exposición. 

Tengo futuras exposiciones, acá en San Diego. Hasta ahorita nada fuera de mi país, pero sin duda me encantaría hacer algo en Chile con ustedes. Una exposición o una sesión de fotos o algo que hagamos estaría increíble.

Puedes conocer más del trabajo de Muriel Méndez en: https://maraloveshop.com/

CRÉDITOS DE FOTOGRAFÍAS:

Dirección Creativa: MARALOVE @mara.love

Fotografía: Yaz Reve @yazreve

Modelo: Ileana Méndez @illeanam